SOPA DE PICADILLO

Ya estoy harta de batuka y más batuka...


¡Pues sí que eran buenos para hacer un trio!


A mi espalda podéis ver la salida de la cárcel en la que se amontonan los familiares de los presos que han venido a visitar a sus allegados, y denuncian privilegios...


Pero... ¿cómo? ¡Mi coche! ¡Y le da a “mi” coche y se va sin dejar rastro! Bueno... un rastro de pintura sí que hay.


...loco y cornúo; porque no veas las juergas que se monta su mujer, cuando está él por los pogramas...


Aquí hay una moneda, sólo una. Ningún billete, ni tarjetas ni ná...


Seguro que ha sido la Teta...Querrás decir la Eta...


Esta es nuestra sopa de picadillo, sube, sube deprisa y baja muy despacito.


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Berja V Muestra de Teatro de Vícar